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Presidenta de AFL-CIO: ataque sin precedente de Trump contra los trabajadores inmigrantes y sus familias

Tan pronto como el presidente Donald Trump firmó diez órdenes ejecutivas para controlar la inmigración y modificar y quitar derechos de las personas migrantes, comenzaron los operativos y deportaciones. Entre los primeros detenidos se encontraba un ciudadano puertorriqueño, gerente de un restaurante/almacén en Nueva Jersey y veterano.

Los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) detuvieron al exmilitar puertorriqueño en Newark, una ciudad santuario para los inmigrantes, junto a otras dos personas que en ese momento no poseían documentación alguna. Luis Janota, propietario del negocio Ocean Food Depot, dijo a la prensa que los agentes de ICE actuaban basándose en el perfil racial y étnico de sus trabajadores.

En la misma semana, a días de su toma de posesión para un segundo término como presidente, el gobierno de Donald Trump dedicó un jueves por la noche a la prometida “deportación masiva más grande” de la historia de Estados Unidos, con el arresto de 538 inmigrantes y la expulsión de otros “cientos” en aviones militares. A la par con esto, el Pentágono se apresta a enviar aún más tropas a la frontera sur.

Las diez órdenes ejecutivas incluían medidas tales como desplegar militares en la frontera sur de Estados Unidos, permitir detenciones de inmigrantes en lugares como escuelas e iglesias, y poner fin a la ciudadanía por nacimiento.

Las órdenes ejecutivas son declaraciones firmadas sobre cómo el presidente desea que se administre el gobierno federal y no requieren autorización del Congreso, aunque el Congreso y los tribunales pueden bloquearlas y negar fondos para su implementación.

Trump también suspendió hasta nuevo aviso todas las llegadas a Estados Unidos de refugiados que solicitaron asilo, inclusive a quienes se le había concedido antes.

Liz Shuler

un inmigrante no se interpone entre usted y un buen trabajo, un multimillonario sí.

AFL-CIO condena las deportaciones masivas y eliminación de derechos

Unirnos como trabajadores y sindicatos es la forma en que nos enfrentamos a los jefes abusivos, hacemos que las corporaciones codiciosas rindan cuentas y construimos una economía que funcione para los trabajadores. Una ofensa a uno es una ofensa a todos.

En respuesta a las órdenes ejecutivas que promueven las deportaciones masivas y el retroceso de los derechos de los inmigrantes, la presidenta de la AFL-CIO, Liz Shuler, emitió la siguiente declaración:

Las órdenes ejecutivas firmadas por el presidente Donald Trump equivalen a un ataque sin precedentes contra los trabajadores inmigrantes y sus familias que debilitará nuestra economía y nuestro país. Mientras Trump y los líderes republicanos extremistas propagan una retórica divisiva sobre los inmigrantes para avivar el miedo, los trabajadores saben que nuestros compañeros de trabajo no son el problema: la verdadera amenaza son los multimillonarios como Trump y Elon Musk que buscan distraernos y dividirnos para poder apoderarse aún más del poder y obtener ganancias cada vez mayores de nuestro trabajo. La conclusión: un inmigrante no se interpone entre usted y un buen trabajo, un multimillonario sí.

Unirnos como trabajadores y sindicatos es la forma en que nos enfrentamos a los jefes abusivos, hacemos que las corporaciones codiciosas rindan cuentas y construimos una economía que funcione para los trabajadores. Una ofensa a uno es una ofensa a todos. El movimiento sindical se solidariza con los millones de valiosos miembros de nuestra fuerza laboral, nuestras comunidades y nuestros sindicatos que son blanco de los anuncios del lunes (20 de enero de 2025). Deportar a personas cuyo trabajo ayuda a nuestro país a prosperar y cortar las vías de entrada a los Estados Unidos no solo es una traición a nuestros valores, sino que también es una receta para el desastre económico.

Nuestros sindicatos lucharán para defender y preservar los derechos fundamentales de todas las familias trabajadoras, incluido el acceso a la educación y la atención médica, así como las protecciones de ciudadanía por nacimiento consagradas en la 14ª Enmienda de la Constitución. Nos uniremos a los aliados de la comunidad para contrarrestar los ataques injustos e inconstitucionales de Trump, para que juntos podamos garantizar que todos estén seguros en el trabajo y puedan continuar construyendo una economía que apoye a las familias trabajadoras, no a los multimillonarios corporativos.

¿Qué derechos tienen los inmigrantes?

“Todas las personas en EE.UU., independientemente de su estatus migratorio, tienen ciertos derechos y protecciones en virtud de la Constitución de Estados Unidos”, afirma el Immigrant Legal Resource Center (ILRC).

Kelli Stump, presidenta de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA, por sus siglas en inglés), dijo a CNN que están distribuyendo tarjetas de “conoce tus derechos” con las diferentes situaciones. Estas tarjetas se pueden obtener de forma gratuita en el sitio web del ILRC o descarga e imprímelas desde aquí.

Las tarjetas del ILRC te permiten tener a la mano los derechos que tiene un inmigrante cuando un agente de ICE toca en la puerta de tu casa o se presenta a tu lugar de trabajo:

“Tienes derechos constitucionales”, dice la tarjeta, entre ellos:

  • Tienes derecho a guardar silencio, a no responder preguntas del agente, a no entregarle ni firmar ningún documento, según la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
  • “No firmes nada sin antes hablar con un abogado. Tienes el derecho de hablar con un abogado”..
  • Tienes derecho a no dar permiso de entrar en tu casa, según la Cuarta Enmienda de la Constitución. El ICE solo podría entrar si tiene una orden judicial firmada por un juez o magistrado y que tenga tu nombre completo, indica el ILRC. De ser así, no abras tu puerta, sino que pídele al agente que te muestre la orden por la ventana o que te la pase por debajo de la puerta. Aunque exista una orden, tienes derecho a guardar silencio y hablar con un abogado.
  • Bajo la Cuarta Enmienda de la Constitución, también tienes derecho a no dar permiso de que se realice una búsqueda en tus pertenencias.
  • Si un agente toca tu puerta, puedes pedirle al agente que se identifique, que te diga el motivo de su visita y, en tal caso, que te muestre la orden judicial. Entonces, puedes deslizar por la puerta o mostrar por la ventana esta tarjeta de “conoce tus derechos”, la cual dice claramente “I choose to exercise my constitutional rights” (“Decido ejercer mis derechos constitucionales”).

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